1 de julio de 2019
Foto: Benildes Rodrigues

En Bruselas, Bélgica, la Caravana Lula Libre entregó un documento de cuño jurídico a la Oficina de las Naciones Unidas el viernes (28 de junio). El texto denuncia la arbitrariedad de la prisión a la que está sometido el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva desde el 7 de abril de 2018.

En el acto, el periodista Bruno Falci, del Colectivo Andorinha y el núcleo del Partido de los Trabajadores – PT en Lisboa, destacó que el carácter político de la prisión es aún más evidente después que salieron a la luz las denuncias del sitio The Intercept Brazil. La divulgación de las conversaciones entre el ex juez Sérgio Moro y el fiscal federal Deltan Dallagnol muestra que ambos actuaron en connivencia en la operación Lava Jato para condenar a Lula, incluso cuando no tenían pruebas.

“Estamos denunciando el proceso totalmente ilegal e ilegítimo, dirigido por un juez que ahora es un ministro del gobierno que él ayudó a elegir”, critica el periodista, recordando que, después de las elecciones de 2018, Moro fue nombrado ministro de la Justicia por Jair Bolsonaro (PSL). Este último solo pudo ganar la elección porque Lula, quien lideraba todas las encuestas, fue encarcelado injustamente y así se le impidió participar en el proceso electoral.

Después de conocer las denuncias de Glenn Greenwald [editor del sitio The Intercept], queda claro que Lava Jato es una herramienta política para derrocar los procesos democráticos progresistas.

Bruno Falci contextualiza que el golpe de estado contra Dilma Rousseff y el arresto de Lula dio lugar a una serie de reveses que iban desde las privatizaciones (de empresas estatales), hasta la extinción de los derechos laborales y la entrega a otros países del Pre-sal (pozos de petróleo descubiertos durante el gobierno de Lula).

“El Pre-sal que se entregó a otros países debería haber sido nuestro pasaporte para el futuro, como afirmó Luiz Inácio. Habían garantías de que éstos recursos se destinarían a la educación y la salud de los brasileños. Sin embargo, hoy se los entregan al capital extranjero. Sérgio Moro es un lacayo del capital extranjero, un juez que asume un lado político – se alineó con la extrema derecha internacional “, destaca el periodista.

Echa un vistazo a las fotos de la Caravana:

Traducido por Cristina Gomes.